SsangYong Motor Company quiere aclarar a la opinión pública lo que implica la decisión que se tomó esta semana, cuando la Junta Directiva de la compañía decidió solicitar el procedimiento de rehabilitación que incluye la solicitud de una medida de protección a la propiedad de la empresa con una orden de prohibición general y un apoyo a la reestructuración autónoma (ARS).
Debido a las condiciones comerciales generadas por el covid-19, SsangYong ha retrasado el pago de unos 60.000 millones de wons (unos 55 millones de dólares) en préstamos e intereses. La medida anunciada busca extender la fecha de vencimiento con sus prestamistas; mientras la empresa llega a un acuerdo, decidió solicitar este procedimiento de rehabilitación para no interrumpir sus operaciones comerciales.
Nueva SsangYong Korando
En todo caso, SsangYong indica que tiene previsto resolver el problema de liquidez actual antes de que se inicie el procedimiento de rehabilitación mediante la solicitud de apoyo de reestructuración autónoma.
El fabricante aclara que tiene el respaldo del gobierno coreano, puesto que SsangYong es una marca emblemática del país asiático, debido a su antigüedad y trayectoria. Además, señala que cuenta con un nuevo inversionista que impulsará este proceso de cambio.
Finalmente, se recuerda que en 2021 SsangYong tiene previsto el lanzamiento a nivel internacional de su nueva camioneta eléctrica.
