Elon Musk, fundador de Tesla, afirmó que su empresa producirá baterías en grandes volúmenes para sus modelos Roadster, Semi y Cybertruck a partir de 2022. El anunció, que se dio a conocer a través del Twitter de Musk, no fue visto con buenos ojos por parte de los inversionistas, quienes esperaban que las baterías fabricadas por Tesla estuvieran en el mercado antes de tiempo.
¿Qué consecuencias trajo esta noticia?
Lo anterior hizo que las acciones de Tesla cayeran 5,5% en la sesión del 22 de septiembre de 2020, situándose cada título en 425 dólares.
Musk también señaló que la intención de Tesla es aumentar y no reducir la compra de baterías a fabricantes como Panasonic, LG y CATL, así como posiblemente a otras compañías.
“Incluso con nuestros proveedores de baterías funcionando a la máxima velocidad, aún prevemos una escasez significativa en 2022 y más allá, a menos que nosotros mismos también tomemos medidas”, mencionó Elon Musk.
Debido a la reacción del mercado de valores, Musk también aludió la dificultad de crecer la producción de las baterías en un periodo breve, puesto que, desde su punto de vista, fabricar máquinas que producen otras máquinas es muy complicado.
Confirman inicio de producción del Model 2
De igual manera, Elon Musk mencionó que para 2023 iniciará la producción de su nuevo modelo Model 2, que se convertirá en el más asequible de Tesla, pues tendría un precio de US$ 25.000. 50% de dicho costo corresponde a las baterías, que para entonces ya deberán ser producidas por la marca y se prevé que ofrezcan mayor autonomía.
Al final del presente año, Tesla espera matricular unas 500.000 unidades en todo el mundo, lo que supone 36% más que en 2019.
Gracias a su nuevo modelo de entrada, el objetivo del fabricante estadounidense es vender unos 20 millones de vehículos anuales a mediano plazo, lo que requerirá muchas más baterías, aunque en la actualidad cuenta con muy pocos proveedores a nivel global para dicho componente.