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Así serán los parabrisas de los automóviles del futuro

Este accesorio será un gran monitor para integrar el ecosistema de atención.

Así serán los parabrisas de los automóviles del futuro

Es impresionante como el mundo digital de conectividad ha transformado la vida de las personas, especialmente cuando se habla de los teléfonos inteligentes o smartphones. Este nivel de tecnologías que ha sido llevado a diferentes ámbitos, ha resultado todo un éxito en los automóviles, donde también se presenta una revolución sorprendente.

Como parte de esta tendencia, la industria automovilística ha visto en menos de dos décadas más avances de los que se habían vivido en los últimos cien años. Además de los sistemas de información y entretenimiento, la conducción autónoma y la movilidad eléctrica, habrá otra serie de tecnologías que llegarán en un futuro muy cercano.

Una de las innovaciones que se sumarán a la revolución tecnológica de los automóviles es el parabrisas, que pasará a convertirse en la parte más importante en cuanto a tecnología se refiere. Replicando ciertos elementos de los teléfonos celulares de la actualidad, el cristal de la parte frontal de los vehículos se convertirá en una pantalla inteligente.

Gracias a la realidad aumentada, en un futuro el parabrisas pasará de ser un simple cristal a un monitor traslúcido, donde se desplegará todo tipo de información, que va desde el sistema de información/entretenimiento y el cuadro de instrumentos, hasta otra serie de aplicaciones que hoy comúnmente se usan en los teléfonos celulares.

Además del “qué” se transmitirá en los parabrisas del futuro, está el “cómo”. Desde ya se trabaja para que el cristal tenga diferentes grados de transparencia, dependiendo de la función que se esté usando (velocímetro o transmitiendo un video), así como en una proyección 3D para estructurar mejor la información y facilitar la comprensión de los elementos espaciales.

Aunque suponer que un automóvil goce de un parabrisas dotado de la tecnología que se mencionó anteriormente, pareciera algo muy lejano, la realidad es que llegará muy pronto.

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