“Seis meses es tiempo suficiente” esto fue lo que el Juez de distrito de EU, Charles Breyer, le dijo a Volkswagen para que éste pudiera arreglar las emisiones de diésel de sus carros, pero el fabricante no cumplió con lo estipulado.
La fecha límite era el 24 de marzo, pero Breyer acordó con Volkswagen y los reguladores de Estados Unidos que le daría cerca de un mes más, pero en caso de que la empresa incumpla otra vez, el juez agendará un juicio sobre los 580,000 vehículos que fueron vendidos en el país y equipados con artefactos manipulados, los cuales se encontró que producen 40 veces la cantidad federal permitida de emisiones.
De acuerdo con Volkswagen, continúan progresando y cooperando con Breyer, trabajando a través del ex director del FBI, Mueller, para encontrar una solución rápida y justa.
Una de las soluciones de las cuales se hablaba, era que el fabricante tenía que volver a comprar todos los vehículos afectados por un costo que iría arriba de los $9 mil 400 millones de dólares.
