Estaba en el tintero del Salón de Shanghái el Mazda CX-30 EV, segundo modelo 100% eléctrico de la marca tras la aparición del MX-30, y que inicialmente solo se comercializará en el gigante de Oriente.
Por ahora no hay mucha información del modelo, pues aún sigue siendo un conceptual, pero se sabe que no es un producto 100% Mazda, sino que es fruto del joint venture con Changan, y que se pondrá a la venta a finales de este 2021.
Algunos reportes de prensa indican que la marca nipona realizó el diseño exterior e interior, a la vez que trabajará sobre el tren de rodajes (suspensión y chasis), mientras que el gigante chino aporta la plataforma y el tren motriz eléctrico.
Fotos: Autohome
Respecto del primero, este CX-30 no es exactamente idéntico al modelo que se vende en Latinoamérica. Tiene mayor despeje y altura, necesarios para poder alojar la batería bajo el piso; así mismo, luce un parachoques delantero rediseñado, cuenta con unas especies de estribos laterales y puertas de mayor tamaño. No son cambios muy evidentes, pero sí lo hacen lucir distinto.
Eso quiere decir que la versión de producción del Mazda CX-30 EV debe ser más parecida a un E-Pro o a un E-Rock (los SUV eléctricos más recientes de Changan) que a un MX-30.
Precisamente, tales SUV eléctricos chinos montan paquetes eléctricos de distinto tamaño. El primero ofrece 120 kW (160 hp) y utiliza una batería de 48,3 kWh para 400 km de autonomía, mientras que el segundo ofrece 162 kW (218 hp) y monta una batería de 84,2 kWh para 605 km. Ambos registros son el ciclo NEDC, por lo que la realidad debe ser al menos cerca de un 30% menos.
Vale decir que el Mazda MX-30 es un SUV muy deportivo de 4,39 metros de largo, que ofrece un tren motriz de 145 hp y una batería con 265 kilómetros de autonomía en el ciclo WLTP.