El coronavirus no perdona y en el automovilismo hace estragos, como sucede en la Fórmula Uno, que al no tener carreras y espantar a los patrocinadores, hace que las escuderías comiencen a tambalear. Algunos team no tienen tantos problemas (como Mercedes, Ferrari o Red Bull), pues otros negocios los mantienen, pero no pasa lo mismo con escuderías como Williams.
El equipo, fundado por Frank Williams en 1977, hace mucho que no está en su mejor momento y la pandemia no les pudo llegar en peor momento. Su desempeño está años luz de lo que fueron sus años de gloria. Malas decisiones, una estructura envejecida, jerarquía y priorizar pilotos con dinero antes que con talento, terminaron por socavar al equipo. Incluso, tuvieron que separar y vender parte de su división Williams Advance Engineering, encargada de las innovaciones tecnológicas y servicios para otros negocios aparte de la Fórmula Uno.
Williams hizo oficial el fin de los contratos con las empresas telefónicas ROKit y ROK Drinks, que estaban pactados para concluir en 2023. Ello implica que Frank Williams tendrá que inventarse algo para poner en sus monoplazas cuando se reactiven las actividades de la Gran Carpa, ojalá sea más creativo que lo que nosotros hicimos en la imagen que ilustra esta nota.
Una publicación compartida por Williams Racing (@williamsracing) el 29 de May de 2020 a las 12:34 PDT
Triste realidad
Williams desclasificó sus cifras del año pasado, pasando de 176,5 millones de libras en 2018 a 160,2 en 2019. Sus ingresos por la F1 cayeron de 130,7 millones a 95,4, con pérdidas que alcanzaron los 10,1 millones, versus las ganancias de 16 millones del año anterior. Por lo anterior, es obvio que las pérdidas de este año tienen que ser brutales.
La venta
Esta es la parte dolorosa. La escudería emitió un comunicado oficial donde señala su intención de vender poco, mucho o completamente toda la estructura de la empresa, con el fin de poder asegurar el futuro de sus trabajadores. Aun se desconoce si eso significa deshacerse de los derechos de marca (específicamente el nombre Williams), una decisión que, de seguro, recae exclusivamente en Frank. El comunicado dice:
"La directiva de WGPH (Williams Grand Prix Holding) está revisando todas las estrategias disponibles para la compañía. Las opciones que se barajan incluyen la posibilidad de inyectar capital al negocio, vender parte de las acciones de WGPH o vender la mayoría de las acciones, hasta una posible venta total de la compañía."
"Aunque todavía no se han tomado decisiones en cuanto a las opciones, la compañía prefiere anunciar el inicio del ‘proceso formal de venta’ para facilitar las negociaciones con las partes interesadas."
