Bugatti, conocida por sus increíbles hiper-deportivos, se dio a la tarea, por simple gusto, de congregar a tres de sus últimos superautos en Dubai. Este exclusivo trío, denominados por la marca como “holy trinity of modern Bugatti” (la santa trinidad del Bugatti moderno) está representado por el Bugatti EB110 Super Sport, el Bugatti Veyron 16.4 Super Sport y el Bugatti Chiron, cada uno personifica la tecnología del fabricante en las décadas de los 90s, 2000 y 2010, respectivamente. Detallemos estos excelsos “juguetes”:
Bugatti EB110 Super Sport
A principios de los 90s, Romano Artioli creó el primer superdeportivo de los tiempos modernos con el EB110. EB corresponde a las iniciales de Ettore Bugatti, mientras que el 110 representa su 110 aniversario.
La presentación de este modelo se hizo el 15 de septiembre de 1991 (fecha del natalicio de Ettore Bugatti) en París. El auto poseía un monoscasco que sólo pesaba 125 kilos y fue el primer auto de producción hecho en fibra de carbón. Dicho elemento, así como el aluminio, fueron empleados para varias partes de la carrocería; los rines eran de magnesio, en tanto que los pernos de la rueda eran de titanio. El auto era impulsado por un motor central de 3,5 L V12 con cuatro turbocargadores, tenía una potencia de 560 caballos y con ello hacia el 0-100 en 3,26 segundos, para alcanzar una velocidad tope de 351 km/h.
Con el EB110, Bugatti logró cuatro récords mundiales, como el auto con mayor aceleración, el deportivo de serie más rápido, el deportivo más rápido impulsado por gas natural y el auto de producción más rápido sobre hielo.
Para 1995 se habían producido solo 96 unidades del EB 110 GT, así como 40 de la variante más rabiosa, denominada EB 110 Super Sport. En la actualidad, como referencia, un Bugatti EB110 Super Sport 1994 cuesta 2,33 millones de dólares, ese fue el precio que un comprador pagó en una subasta realizada por la firma Sotheby's el año pasado.
Bugatti Veyron 16.4 Super Sport
El Bugatti Veyron 16.4 salió al mercado en 2005, empleaba un monocasco de fibra de carbón, tenía tracción integral y cuatro turbocargadores. Este primer hiperdeportivo ostentaba una máquina W16 de 8,0 L con una potencia de 1.001 hp y un torque de 153 kg-m. Esto le permitía acelerar de 0 a 100 km/h en 2,5 segundos y alcanzaba una velocidad máxima de 407 km/h. Posteriormente, en 2010, la marca francesa develó la variante mejorada denominada Veyron 16.4 Super Sport, este modelo guardaba bajo el capó 1.200 equinos y logró establecer un nuevo récord de velocidad para autos de calle, al desarrollar 431,072 km/h, con ello se convirtió en el auto de producción más rápido del mundo.
Sólo 450 Veyron 16.4, junto con 48 Super Sport, fueron fabricados en el complejo de Molsheim hasta 2015.
Bugatti Chiron
El Bugatti Chiron se develó en 2016, se anima con un motor W16 de 8,0 litros con 1.500 equinos y 163 kg-m de torque.
Es el modelo que en la primera década del siglo estableció nuevos estándares de innovación tecnológica en la industria automotriz. Hace el 0-100 en 2,4 segundos, alcanza los 200 km/h en 6,1 y llega a la marca de los 300 km/h en 13,1 segundos. Su velocidad máxima gobernada es de 420 km/h.
En 2019, el Bugatti Chiron estableció un nuevo récord de velocidad, logrando tocar los 490,484 km/h. Nunca un vehículo de producción había alcanzado tal velocidad.
De los 500 modelos que se planean producir, más de 250 ya se han fabricado y entregado. Su precio unitario es de “apenas” 2,92 millones de dólares.