Peugeot e-Legend rinde homenaje al 504 coupé

El Salón de París de 1968 fue la antesala de uno de los Peugeot más reconocidos en todo el mundo, con fama de indestructible, disponible en muchas configuraciones y que vivió mucho más de lo que la misma firma pensaba. Hablamos del Peugeot 504, uno de los carros en los que todos concuerdan en su grandeza. Aprovechando que se cumplen 50 años desde aquel momento Peugeot anunció al e-Legend, un auto que rememora el clásico diseño del 504 Coupé, modelo que se lanzaría un año después.

Estética con clase

Todos, absolutamente todos los distintivos al original de Aldo Brovarone están ahí, pero reinterpretados en el lenguaje de diseño más agresivo que lleva la marca hoy en día. Por ejemplo, su frontal inclinado con los faros dobles y la nomenclatura del modelo sobre la insignia de Peugeot antigua, tipo escudo, en la punta del capó.

Otros puntos a destacar son las líneas del diseño, el ducto de respiración que va pegado al parabrisas, las ventanillas auxiliares de las puertas retratadas como una extensión del parabrisas frontal, el marco cromado de las ventanas, los pilares delgados, las salpicaderas, la decoración en el pilar posterior y los focos traseros dispuestos en posición vertical, sin olvidarnos del parabrisas posterior ligeramente empotrado hacia el interior. Se trata de hermosos homenajes que nos llevan a aquella época de diseños italianos, proporcionados y elegantes.

El e-Legend tiene una carrocería de 4,650 mm de largo, 2,690 mm entre ejes, 1,930 mm de ancho y 1,370 mm de alto, donde su color platinado parece reaccionar con la luz. Las llantas son de 19", un tamaño un poco sobredimensionado, como siempre sucede en los concept cars.

Un mundo al interior

Y el interior, aunque muy futurista, sigue los códigos de aquella época. Prueba de ello son los asientos de velour, grandes y con reposacabezas que apenas sobresalían del respaldo, así como el uso de madera que contrasta con la tapicería en azul vibrante. La consola central es minimalista, con acentos dorados. Allí se lucen las bocinas del sistema de audio Focal y una gran pantalla que domina prácticamente toda la consola, pero que pasa desapercibida por las gráficas que tiene, como las pantallas en las puertas.

Sobre el volante pequeño, como en el lenguaje iCockpit de Peugeot, se alzan tres módulos digitales a modo de cuadro, que van exhibiendo información distinta según los modos de manejo empleados, que se elijen desde una consola central flotante. Al final, nos encontramos con cerca de 16 pantallas informativas.

Cargado de tecnología

En cuanto a tecnología, el e-Legend propone un sistema de audio Focal que, como cuestión principal, permite que cada ocupante escuche su propia música o tenga acceso a su propio contenido. Por ejemplo, el GPS podría enviarle información de recorrido al conductor, sin molestar el ambiente de los otros pasajeros. Nos cuesta creerlo posible en un ambiente donde no hay aislantes físicos independientes para cada ocupante, pero bueno, para eso es el futuro.

De más está decir que el sistema multimedia tiene inteligencia artificial y comandos naturales por voz, los que serán pronto un detalle a incluir en todos los autos de alta gama.

Eléctrico y autónomo

El sistema de propulsión eléctrico del e-Legend consiste en un motor de 340 kW de potencia máxima (449 caballos) y 590 Lb-pie, junto a una batería de 100 kWh y tracción a las cuatro ruedas. Logra el 0 a 100 en menos de 4 segundos y una velocidad final de 220 km/h. Además, presenta una autonomía de 600 km y un modo de carga rápida que apuesta a otorgar 500 km con apenas 25 minutos de enchufado.

Finalmente, el e-Legend presentará cuatro modos de manejo, dos autónomos y dos manuales. Los dos autónomos se denominan Soft y Sharp. En estos modos, el volante se retrae tras la consola. El primer modo busca la diversión, por lo que reduce a un mínimo las pantallas y elementos informativos. El segundo modo es más conectado y entrega todo el potencial tecnológico del auto, incluyendo acceso a redes sociales.

Por otro lado, los dos modos manuales, van en el mismo tenor. El modo Legende propicia un manejo de Gran Turismo, con los tres módulos informativos imitando los relojes del 504, mientras que el modo Boost te pone 100% al dominio de las prestaciones de este coupé.

Nos queda claro que Peugeot quiere ser protagonista en París con este modelo, del que de seguro saldrán varias ideas para sus futuros modelos.