El fabricante alemán Opel estrenará en el marco del Salón Internacional del Automóvil de París su prototipo GTC. El deportivo dos volúmenes de tres puertas es un “dream car” alcanzable, concebido para mostrar la revitalización de la marca. Esta energía también se expresa en el vibrante y exclusivo color Rojo Metal líquido del exterior.
Pisándole los talones a la nueva generación del Astra Sports Tourer que también se presentará, el GTC París es el siguiente paso en la definición de las formas de la nueva gama de Opel.
Este prototipo está impulsado por un propulsor de 2.0 litros, con turbo compresor de doble entrada e inyección directa de gasolina, que le permiten desarrollar una potencia de 290 caballos equipado con una caja de cambios manual de 6 velocidades. Este poderoso motor tiene doble variador de fase de distribución y dos árboles de equilibrado que son la base de las impresionantes cifras de prestaciones. Además, un diferencial autoblocante en el tren delantero ayuda a mantener el control sin limitar la disponibilidad de par de este avanzado motor turbo.
El GTC París también equipa el sistema de suspensión adaptativa FlexRide, que adapta continuamente la suspensión a los cambios en el estilo de conducción y a la velocidad de paso por curvas. Además de una experiencia de conducción más satisfactoria, el sistema FlexRide también ofrece mayor seguridad en situaciones de emergencia, ya que mejora la estabilidad del vehículo en toda circunstancia.
Con 4,46 metros, el GTC París posee el tamaño ideal para ser un compacto modelo deportivo, pero aún ofrece espacio para cinco ocupantes. Tres líneas muy marcadas ofrecen una forma escultural. La forma característica de Opel se introducen en suave pliegue a lo largo de todo el estribo lateral.
Una segunda línea recorre desde la manilla de la puerta hasta la parte trasera, destacando la silueta deportiva del vehículo diseminando las superficies hacia un fino corte en la marcada línea de cintura. La tercera línea que sigue la silueta del techo está acabada en aluminio pulido marcando la línea de las ventanillas, lo que guía la vista hacia el acentuado spoiler integrado.
La sección de la cintura es el área más dramática del Opel GTC París. El punto más ensanchado se rebaja para darle una ancha apariencia atlética, dando al modelo una presencia en la carretera muy poderosa. La línea del pilar C se lleva hasta la parte trasera y se ondula hacia el spoiler trasero, que está ingeniosamente integrado en la línea del techo.
El frontal es limpio aunque lleno de estilo y carácter e incorpora el típico pliegue central de Opel. Además está más acentuado por unos exagerados faros delanteros muy finos en forma de ojo de águila que actúan como paréntesis entre la refinada barra cromada con el logo y la dramáticamente baja parrilla delantera trapezoidal que destaca su carácter deportivo.
Las características luces diurnas de LED están perfiladas con piezas cromadas cuidadosamente talladas que en sí mismas ya son una pieza escultórica. La aerodinámica de las dinámicas llantas de 21 pulgadas está optimizada con inserciones en fibra de carbono, que incluyen las tapas centrales.
El GTC París también equipa el sistema de suspensión adaptativa FlexRide, que adapta continuamente la suspensión a los cambios en el estilo de conducción y a la velocidad de paso por curvas. Además de una experiencia de conducción más satisfactoria, el sistema FlexRide también ofrece mayor seguridad en situaciones de emergencia, ya que mejora la estabilidad del vehículo en toda circunstancia.